Carta a "la mujer de mi vida":

Esta carta va dirigida a ti, a la que serás "la mujer de mi vida"... ¿Sabes una cosa?, el otro día tras una conversación con un amigo y haciendo memoria resulta que me di cuenta de que se lo había dicho ya a varias mujeres. Verás, te voy a contar: con la primera tuve mis dos hijos y con alguna he llegado a convivir... Todas eran muy diferentes entre sí y de todas ellas guardo un buen recuerdo pues es de los buenos recuerdos con los que procuro alimentar mi corazón y no de los malos momentos vividos, que esos van a la planta de reciclaje sentimental que hay en mi corazón... A todas les deseo lo mejor en sus vidas y aunque de alguna no se nada ya, de otras sé que tienen relaciones estables, y yo no me arrepiento de ninguna de las experiencias que he vivido con esas mujeres. Con cada una de ellas he vivido algo completamente diferente que me servirá para cuando te conozca a ti. De momento ni siquiera sé cual es tu nombre, ni el color de tu piel, ni tu edad, ni como sonríes, o ¿quizás si...? Pero sé que existes y que nuestras vidas algún día acabarán por cruzarse, pero eso será cuando yo esté preparado para que esto suceda y seguramente todavía no lo estoy... Poco a poco y gracias a la "herencia" que me dejó mi querida "tieta" Nieves estoy aprendiendo a convivir conmigo mismo, para que así cuando llegue el día en que te conozca y decidamos convivir juntos las cosas nos vayan bien. Tieta, aprovecho para decirte que me acuerdo mucho de ti, y que aunque no te escriba, y no lo hago porque somos ambos los que estamos escribiendo esta carta, no hay día en que no recuerde todos esos momentos que pasé contigo, de todo lo que me enseñaste... del favor que me hiciste tú a mi... fue un privilegio dedicarte en plenitud nueve meses de mi vida... No te puedes ni imaginar todo lo que me ha aportado esta experiencia... ¿Sabes? hace poco fallecieron María y Mercedes, y Amparo está muy malita, hoy la iré a ver... el última día que fui sentí que se despedía de mi y quiero volver a verla, pues está muy sola... ya sabes, como casi todas... Algún día hablaré de esas "herencias" que estoy recibiendo en vida... no quiero nada material, ni dinero, ni nada... y es que alguna me quiere dar algo, pero yo les digo que no... que se lo den a esos niños que se mueren de hambre, que ellos lo necesitan más que yo... que den vida a otro cuando se vayan... que no lo dejen a los que ya tiene mucho y encima no van ni a verlas, pero que cuando mueran irán como aves carroñeras a recoger "su herencia"... Tieta, yo sé que tengo que escoger entre una cosa u otra, entre las cosas materiales y la FUERZA, y creo que escogo bien... El dinero y las cosas que se lo queden otros, yo quiero la FUERZA, su FUERZA y noto que la recibo... Como la que también me dejó mi amigo Antonio, mi ex-jefe, el día que dejé de trabajar para él y me fui después de veintidós años diciendo simplemente: hasta pronto! Le podía haber sacado mucho dinero pero no lo hice... ahora en cambio es mi amigo y sé que él me quiere, y él sabe que yo también le quiero a él, y le respeto. Y sé también que leerá esto que escribo porque me dice que lo hago muy bien y que siga escribiendo...

Cariño, yo mientras seguiré soñando contigo y en mis sueños te amaré, pues allí vuelo noche tras noche para estar unas horas junto a ti, en ese lugar eres mía siempre que yo quiera, en ese lugar te veo y te puedo sentir, besar y tocar... en ese lugar nuestras almas hacen el amor sin que nadie se interponga entre nosotros, sin que nadie lo sepa... Sólo tú, y yo... La próxima vez que te escriba una carta lo haré con tu nombre y las palabras no serán sólo letras escritas, serán trocitos de mi corazón, que se abrirá para unirse en UNO con el tuyo. Y es que como dice mi amigo Patxi: sólo siendo un verdadero hombre puedes tocar tus sentimientos.


josé maría

PD: la cita de hoy:

"Deja tu mente en su estado natural, serena. No sigas los pensamientos de "Esto es un problema, aquello es un problema". No etiquetes las dificultades como problemas, deja tu mente en su estado natural. De esta manera dejarás de ver las circunstancias miserables como problemas".
De "Transformar los problemas en felicidad" Lama ZOPA RINPOCHE.

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